El Equipo CESCA de España acaba de publicar la traducción de un informe japonés con fecha mayo 2024 sobre la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH).
El VPH es una infección de transmisión sexual pero el objetivo de la vacuna contra el VPH es prevenir el cáncer de cuello de útero (CCU). En Japón se comenzó a aplicar en 2009 y en 2013 se suspendió debido a los efectos adversos neurológicos graves que presentaba: por ejemplo, enfermedades autoinmunes y problemas cognitivos y neurológicos, incluidos los trastornos del movimiento. Sin embargo en 2022 volvió al calendario vacunal.
Del informe que compartimos aquí extraemos los siguientes conceptos:
- La vacuna aumenta el riesgo de muerte por todo tipo de cáncer.
- Ningún estudio observacional demuestra eficacia frente al CCU invasivo.
- Peor aún: una paciente murió de CCU ¡lo que la vacuna promete evitar!
- El riesgo de cáncer anal aumenta en adolescentes vacunadas desde los 17 años.
- Tras 7 años de la vacunación, aumentan los cánceres no relacionados con el VPH.
- El daño de las vacunas contra el VPH supera a cualquier hipotético beneficio.
Y transcribimos su contundente conclusión:
Las vacunas contra el VPH aumentan significativamente el cáncer y la mortalidad por todas las causas sin pruebas de una reducción de los cánceres relacionados con el VPH. Las vacunas contra el VPH deberían retirarse.
Al igual que Japón, España introdujo la vacuna contra el VPH en 2009. Se constata el incremento del número de ingresos hospitalarios y la mortalidad por CCU desde 2009:
- Tasa anual promedio de hospitalización por 100.000 mujeres: entre 1998-2008 de 11,4 y entre 2009-2022 de 15,2.
- Tasa anual promedio muertes por 100.000 mujeres; entre 1998-2008 de 2,6 y entre 2009-2022 de 2,7.
En Uruguay la vacuna contra el VPH se empezó a aplicar en 2013.
Hay que destacar que está vigente desde 2012 el decreto 41 por el cual se establece la notificación obligatoria de un conjunto de enfermedades, en cumplimiento del Reglamento Sanitario Internacional. Entre ellas se encuentran todas las enfermedades prevenibles por vacunación EXCEPTO la infección por el VPH. Es que el VPH no mata a nadie, ni hombres ni mujeres. En general, no provoca daño alguno. De 150 tipos del VPH, unos 15 tienen capacidad cancerígena y sólo cuando persisten infectando durante años (entre 20 y 30 años seguidos). Es desproporcionada la campaña de vacunación contra una enfermedad excluida del monitoreo sanitario y con esta vacuna tan peligrosa que los expertos recomiendan su retiro del mercado.
Pensá. Cuestioná. No sucumbas al sesgo de autoridad. Está en juego la vida desde la infancia. Y no sólo la vida de las niñas a las cuales la vacuna puede producir lo que promete evitar (el CCU) sino también la de los varones que ni siquiera padecen CCU pero pueden sufrir sus efectos adversos como el desarrollo de otros cánceres mortales.
NOTA:
la fuente por el Equipo CESCA está aquí.